"In me omnis spes mihi est" (Terencio).

17 de julio de 2010

EL IMPERIO DE LA VERGÜENZA

El imperio de la vergüenza es sencillo de explicar, miren. El imperio, ahora en nuestro tiempo, son las macro empresas globalizadas mundialmente (los "cosmócratas") que principalmente se ocupan de las industrias farmacéutica, armamentística, petrolera y por el estilo. Estos nuevos emperadores mundiales con su enorme poder adquirido subyugan incluso a las naciones. En muchas ocasiones también ocurre que las personas que se erigen en la cúspide de esas macro-empresas son también quienes dirigen los designios de sus países y prevalece siempre el afán de poder y riqueza.

La vergüenza, es el expolio que sufren muchos países, sobre todo los llamados del tercer mundo, gracias a la asombrosa maquinaria de intereses y sumisiones que han creado estos nuevos imperios. La vergüenza también es cómo irremediablemente miles de millones de personas en el mundo viven bajo la más absoluta miseria debida a que sus países poco pueden hacer más que verse saqueados por un sistema que les expolia y les impide recuperarse. No hay futuro para ellos. Estas muertes perfectamente podrían ser denominadas asesinatos por lo que el autor denomina “las armas de destrucción masiva” de las potencias o los dictámenes que las subyugan. El hambre y la deuda que asolan las economías nacionales y que le vetan toda posibilidad de levantar cabeza.

De entre los muchísimos ejemplos que aporta, anonadado me he quedado al conocer que gran parte de la actual deuda de Ruanda (asolada por un genocidio tribal interno donde casi un millón de personas fueron asesinadas ante el pasotismo de la comunidad internacional) corresponde al pago por los machetes comprados y utilizados por el anterior régimen para matar a sus propias familias, madres, hijos, hermanos, etc. Para ello dedican casi todos los recursos del país.

Jean Ziegler fue relator especial de la ONU para el derecho a la alimentación y ahora vicepresidente del consejo asesor para los derechos humanos también de la ONU. Debido a estos cargos ha viajado y conocido muchos de los hechos y efectos que en este libro relata. Quizá esta denuncia sea su granito de arena ante una situación irreversible salvo con una gran revolución.

Dejo unos extractos interesantes:

«Los señores de la guerra económica han saqueado el planeta. Atacan a los Estados y su poder normativo; cuestionan la soberanía popular, subvierten la democracia; saquean la naturaleza y destruyen a los hombres y a sus libertades.» «Ningún contrapoder constituido —ni estatal ni sindical— está en condiciones de cuestionar su poder absoluto», añade. ¿Y qué hacer contra su violencia, su cinismo o su desprecio? Pues «volver a empezar la revolución», «luchar por la justicia social planetaria» e «informar y hacer trasparentes las prácticas de los señores feudales». «Los vampiros huyen de la peste de la luz del día.»

“El orden mundial 'asesina' cada día a 100.000 personas hambrientas”.

“Los señores del imperio de la vergüenza organizan la escasez de servicios, de los capitales y de los bienes en función del máximo beneficio", asegura. Esta escasez organizada destruye cada año la vida de millones de hombres y mujeres sobre la tierra. Así más de 10 millones de niños de menos de 5 años mueren cada año por desnutrición, epidemias, contaminación de las aguas e insalubridad”.

“Para lograr imponer este régimen de sumisión de los pueblos a los intereses de las grandes compañías privadas, existen dos armas que los nuevos señores feudales saben utilizar admirablemente: la deuda y el hambre”.

“Además, esta formidable maquinaria diseñada para someter maltrata y difama a la ONU y a su secretario general, y ya no acepta ninguna de las limitaciones del derecho internacional, que se encuentra en estado agónico. Los señores de la guerra económica, no contentos con saquear el planeta, atacan a los Estados, cuestionan la soberanía popular, subvierten la democracia y destruyen las libertades de los hombres.”

4 comentarios:

  1. Macho, ya que te interesa el tema, te recomiendo la más reciente película de Michael Moore: "Capitalismo, una historia de amor". Ahí al igual que en este libro, se constata el imperio corporativo que hoy nos domina. Felicidades por tu blog.

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  2. Gracias por la recomendación. Me la apunto. Saludos.

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  3. Me viene a la cabeza el libro de Eduardo Galeano: Las venas abiertas de América latina. Un clásico.
    Si no lo has leído, no te lo pierdas.

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  4. Apuntado queda. Le diré a mi biblioteca habitual que lo compre jejeje. Gracias.

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