"In me omnis spes mihi est" (Terencio).

12 de diciembre de 2008

AISLACIONISMO MENTAL

Acabo de leer la siguiente noticia y me he llenado de rabia e indignación, como tantas veces en estos temas.

“Los grupos del tripartito (PNV, EA, EB) y EHAK rechazaron en el Parlamento vasco una propuesta del PP para que la próxima edición de la Vuelta a España pasara por Euskadi, coincidiendo con el 30 aniversario de la última vez en que la ronda discurrió por la comunidad autónoma. Para argumentar su rechazo, el PNV y EA aseguraron que - 'esto no es España' -, según denunció el PP.”

Sí señor, no faltaría más.

Se ve que estos señores son tan cortos de miras y están tan impregnados de rechazo y odio rancio hacia todo lo que suene a español que no alcanzan a distinguir entre deporte y política, entre reclamación política y defensa de unas ideas (no valoro las ideas), y la fiesta multinacional de un deporte, que entre otras cosas, siempre ha viajado de unos países a otros como muestra de hermanamiento y acercamiento más allá de fronteras políticas.

Y es que desde siempre, el nombre de las grandes vueltas, llámense Tour, Giro o Vuelta, ha supuesto no limitarse a sus territorios, sino la expansión a unos vecinos que también han compartido esa fiesta del deporte y de la unión multiterritorial que suponía el trasiego de las vueltas por etapas de unos lares a otros. Así, el Tour de Francia, el más internacional, a lo largo de sus historia ha visitado muchas veces España; Pamplona, Barcelona e incluso San Sebastián – parece que a ellos no les dijeron que eso no era Francia -, y podemos sumar la sexta etapa del futuro Tour de Francia 2009 entre Gerona y Barcelona; también ha visitado Inglaterra, Italia, Alemania, Bélgica, Luxemburgo y quizá algún otro que desconozco; el Giro de Italia ha visitado Francia e incluso Austria; y como no, la Vuelta a España ha visitado Francia por los pirineos, y nunca ha habido ningún problema.


Pero para sembrar polémica y atizar los vientos políticos, para utilizar el deporte como arma política y sembrar odio o rechazo todo vale, y algunos no pierden su oportunidad. Y así lo han hecho.

Si al menos alegaran razones de seguridad y se remitieran a no poder garantizar la integridad de la Vuelta y las personas, que ya es triste, podría ubicarlo en la lógica de mi cerebro. Pero esto sí que no me cabe, entre otras cosas porque siguen privando de una gran competición ciclista al País Vasco y sus habitantes, quienes seguramente sean los mayores y mejores aficionados a este deporte en Europa.

Día a día, mientras el deporte y sus competiciones se convierten en estandartes de globalización y hermanamiento, de confrontación de fuerzas bien entendida, todavía queda quién lo utiliza para separar y aislarse.

Pero claro, es lo que estamos educando por algunas tierras con tanta transferencia educativa a las comunidades y tanta mierda, que esa es otra. La Constitución lo dice, “todos iguales” y nadie le hace caso. Y así nos va. Luego mira lo que hacen y piensan algunos.

Y mientras escribo esto, mejor que yo lo ha resumido Ramón Trecet en su blog deportivo con una excelente frase “el aldeanismo de estos nacionalistas es de vergüenza ajena”. Con eso me quedo.



3 comentarios:

  1. No son los únicos. Hoy precisamente en El Periodico de Catalunya:

    http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=570135&idseccio_PK=1011&h=

    Sobre la mitad de la entrevista.

    En cualquier caso, si no quieren que pase la Vuelta por el PV que no pase, con lo ancha que es Castilla.

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  2. Las posturas irracionales alegan argumentos incoherentes. Ahora debería plantearles alguien a estos señores: ¿qué pinta entonces, por ejemplo, el Athletic en la Liga? (conste que a mi el Athletic no me cae mal)

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  3. Cuando escucho o leo afirmaciones,que no ya por desgracia noticias, de semejantes payasetes irracionales me comparo con una con una botella de gaseosa en estado de plena agitación. Sin llegar a destaparme del todo, a modo de un ínfimo poro en el tapon de goma que la cierra, diré que aborrezco todo tipo de intolerancia, aislamiento territorial o mental, barbarie ideológica, falta de verguenza, pisoteo indiscriminado de NUESTRA constitución, falta de respeto supino por todos aquellos que pueblan el que parece ser su país y que no comparten sus pajillas mentales (y son la mayoría) y tantas y tantas cosas que representan estos individuos porque, mal que les pese, su país es un enclave (precioso por cierto) de mi, de nuestro país y que se enteren que tiene un único nombre y es ESPAÑA. Basta de hacerles publicidad, no hay mejor medida que la indiferencia total y la aplicación callada y severa de nuestra carta magna. Es lo que hay y toca acatarla. Que nos dure. TROTAMUNDOS.

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